Policia y Familiares han revelado nueva informacion sobre la muerte de estas dos personas.
Ben Barnhard, de 13 años, tenía ilusiones: había bajado 45 kilogramos, un logro para un chico que había soportado las burlas de sus compañeros de clases y se refugiaba en su habitación con su mascota, un gato negro, o haciendo papiroflexia. Sin embargo, un mes antes del regreso a clases, la madre del menor, la psiquiatra Margaret Jensvold, lo mató de un disparo en la cabeza y después se suicidó.
La Policía encontró el martes pasado ambos cadáveres en las recámaras de la casa en la que vivían en Kensington, un suburbio de clase media alta en Maryland La Policía también encontró un mensaje.
"La escuela, no puedo hacer nada con el sistema escolar", fueron las palabras con las que comenzó la carta. "Las deudas me matan. Me ahorcan", agregó el mensaje.
Los integrantes de la familia se dijeron atónitos de ambas muertes y señalaron que Jensvold estaba cada vez mas tensa debido a sus apuros financieros y la angustia de las discusiones que tenía con las autoridades del sistema escolar público del condado debido a la educación especial que necesitaba su hijo, quien sufría espectro autista. Jensvold no tenia mucho dinero y no quería que su hijo regresara a la escuela pública en la que, a decir de la familia, ella se sentía juzgada y marginada con severidad y en la que Ben sufría problemas. Estas fueron algunas de las razones por las cuales decidio matar a su hijo y suicidarse, ya que al parecer en el mensaje confirmo que si ella se mataba sola, su hijo no podria salir solo en esta Sociedad tan injusta